396. Bobby McFerrin

Bobby McFerrin



Llevo unos cuantos días obsesionado con la discografía del señor Bobby McFerrin. Para empezar, confieso que, por pura ignorancia, consideraba al autor de "Don't worry be happy" un palizas, un payasete, un cantamañanas de cuarta regional, a medio camino entre 'Scatman' John y el otro pesado que puso de moda el "Mambo nº 5" como canción del verano hace algunas temporadas. Es decir, consideraba que Bobby McFerrin era flor de un día, un tipo innecesario que estaba en el lugar preciso en el momento preciso, que sacó "Don't worry be happy" y se echó a dormir.

No cabe duda de que sólo con ese hit Mr. McFerrin puede vivir de las rentas por muchos años (de hecho, si enciendes la radio ahora hay un 50% de posibilidades de que esté sonando su canción), pero por curiosidad el otro día me tragué mi orgullo y me puse a escuchar otras canciones de Bobby, y me llevé una agradable sorpresa.

Porque Bobby McFerrin está más allá. Más allá de la raiofórmula. Más allá del bebop. Más allá del doo-wop. Más allá del scat. Más allá del bel-canto a capella. Casi casi, está más allá de la voz humana. Hay que concebir a Bobby McFerrin como un cantante que conjuga una de las mejores voces del soul con una capacidad casi sobrehumana de mimetismo gutural. Y además, sustrayendo toda connotación dramática y aburrida del género que toca (ya sea el blues, el pop o la música clásica) y dotándolo de humor, de optimismo y de salero.

Hablando en friqui: Bobby McFerrin = Stevie Wonder - Lionel Richie + Eddie Murphy - Bill Cosby + el negro chiflado de "Loca academia de policía" - Shooby Taylor.

Pero vamos a escuchar algunas muestras. Olvídate del pastoso "Don't worry...", y escucha, si no lo has hecho nunca, algún otro de sus temas más conocidos:

- Thinkin' about your body (sólo 30 seg.)
- Drive my car
- From me to you
- Pink Panther theme
- I feel good
- Ziggurat
- Circlings
- Blackbird
- Beverly Hills blues
- Double cello concerto
- Graffitti scat (con Los Teleñecos).

Esta muestra es muy limitada; son algunos de los pocos archivos en descarga directa que he encontrado por ahí, pero no están mis temas favoritos. Por supuesto, el interesado puede y debe ir también a YOUTUBE y buscar allí videos de sus recreaciones del 'Ave Maria' de Bach, lecciones de música o improvisaciones a capella cachondísimas.

Estoy convencido de que si no hubiese obtenido tanto éxito comercial con el dichoso temita citado, ahora sería uno de los secretos mejor guardados de la música negra, un personaje de culto escondido entre el catálogo de genios de Blue Note (su actual discográfica, con la que tiene más de 10 discos publicados), un virtuoso genio del jazz que se codea con músicos consagrados como Herbie Hancock o Chick Corea. Conociéndole, la gente tendría otro concepto de él menos frívolo y patético. Desde aquí pido otra oportunidad para este hombre, que se merece más respeto del que la historia le ha concedido.

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